Karmelo Etxegarai
Este piso tenía grandes posibilidades por su tamaño, distribución y luz. Pero su estado de conservación era pésimo: paredes tenían agujeros y desconchones y estaban pintadas con colores fuertes. Los suelos y carpintería totalmente apolillados, la cocina y baño muy anticuados y mal aprovechados. Toda la vivienda está sucia y vacía, por lo que parecía más pequeña y, también, generaba rechazo en los compradores. Claramente, necesitaba una reforma integral, por lo que durante los 8 meses previos en el mercado, gestionado directamente por los propietarios, recibió muy pocas visitas, ninguna oferta seria y negociaciones muy a la baja.
¿Cómo lo hicimos? En primer lugar, se hizo una intervención de relooking, realizando pequeños arreglos, pintando todas las paredes y carpintería y cambiando la iluminación. Se disimularon (no se ocultaron) sus puntos flacos y se potenciaron sus puntos fuertes, como la amplitud de las estancias y su gran terraza al exterior. Se realizaron planos de posibles reformas que mejoraban el aprovechamiento y la funcionalidad de la vivienda y se hizo un Home Staging completo, amueblando y decorando todas las estancias de manera neutra, moderna y atractiva, para ayudar a los compradores a visualizar su potencial.
Como resultado, el piso recibió un aluvión de llamadas de interesados y en la segunda visita, en 4 días, se consiguió cerrar la venta sin negociación.